

En los procesos hidrometalúrgicos, la corrosión representa un desafío significativo debido a la presencia de ambientes altamente ácidos, temperaturas elevadas y agentes químicos agresivos. Operaciones como la lixiviación, la extracción por solventes y la electrodeposición someten los equipos a tensiones mecánicas y químicas extremas, lo que requiere el uso de materiales con una durabilidad y resistencia a la corrosión excepcionales. Placas revestidas de acero-titanio y acero-acero inoxidable Se emplean con frecuencia para abordar estos desafíos, particularmente en equipos clave como reactores, tanques de almacenamiento de ácido e intercambiadores de calor.
Los entornos ácidos de la hidrometalurgia suelen provocar formas graves de corrosión, como picaduras, corrosión intergranular y agrietamiento por corrosión bajo tensión. Las pulpas abrasivas y las condiciones de flujo turbulento generan complicaciones adicionales, lo que agrava la degradación del material. Dados estos factores, la selección de los materiales de construcción es crucial para garantizar la fiabilidad y la longevidad de los equipos de procesamiento.
Los materiales de revestimiento, como las placas de titanio-acero y de acero inoxidable-acero, son altamente eficaces para superar los desafíos mecánicos y de corrosión de los procesos hidrometalúrgicos. Estos materiales compuestos combinan la superior resistencia a la corrosión de la capa de revestimiento con la resistencia estructural y la rentabilidad de la capa base.
Las placas revestidas de acero inoxidable son una opción popular en hidrometalurgia debido a su asequibilidad y excelente resistencia a entornos ácidos.
Las placas revestidas de acero y titanio son el material elegido para las aplicaciones hidrometalúrgicas más exigentes, especialmente donde hay ácidos fuertes y temperaturas elevadas.
Si bien las placas revestidas de acero inoxidable son más rentables inicialmente, ofrecen un rendimiento confiable en entornos moderadamente corrosivos. En condiciones extremas, las placas revestidas de acero y titanio, aunque inicialmente más caras, ofrecen una durabilidad superior, lo que reduce significativamente los costos de mantenimiento y reemplazo con el tiempo.
La elección del material de revestimiento adecuado depende de las condiciones operativas específicas. Las placas revestidas de acero inoxidable y acero ofrecen una solución práctica y económica para la mayoría de los procesos hidrometalúrgicos, mientras que las placas revestidas de acero y titanio son indispensables para gestionar riesgos de corrosión severos. Al aprovechar las ventajas de estos materiales, las instalaciones hidrometalúrgicas pueden mejorar la fiabilidad de los equipos, optimizar el rendimiento y minimizar los costes operativos a largo plazo.
Fugo Tech se centra en la fabricación de placas de metal revestidas y distribuye tuberías, accesorios, bridas y sujetadores de acero inoxidable, titanio, aleación de níquel, circonio y otros metales no ferrosos.